CABALLOS

Hoy me puse a reflexionar, como usuario y o afectado por la estafa volkswagen, preocupado por los daños ecológicos de mi vehículo, encargué a una amiga el diseño de un modelo más ligero y más limpio, en pocos días me presentó este prototipo, cómodo, ligero y sobretodo muy ecológico, me pareció muy bueno, ya contacté con otro amigo que tiene un burro, para que con la mezcla de yegua y burro salga un mulo y así conseguir un motor más potente.

Me hubiera gustado más un modelo ligero como este para la ciudad, que sea desmontable para poder aparcar el vehículo en la calle y el animalito subirlo a la terraza de mi piso, incluso pensaba sembrar césped para que pudiera alimentarse, al tiempo que hiciera de corta césped.

Dudo, si sería mejor este otro más fuerte para transportar la familia y mercancías, casi con la misma cantidad de alimento, tendría más prestaciones.

 Claro, yo soy más de tartana o diligencia, se adapta más a mi estilo de familia itinerante, podía adaptarla para comer y dormir como mi chula y con segar un poco de hierba en las cunetas de las carreteras, completando la dieta con un saco de cebada, me saldría el viaje gratis.

Después de ver este otro modelo, ya no se qué hacer, siempre tuve coches grandes para no tener problemas de espacio, además gastan lo mismo y duran más, supongo que serán más caros, pero los bancos ya están abriendo el grifo y no me importaría sacrificar un poco de mi pensión, al menos la subida de este año, a si tendría un enorme espacio y un potente tractor.

Esto ya sería el colmo de mis deseos, por volumen y potencia, la verdad es que mi clula tiene 130 caballos mecánicos, más o menos equivalente a estos tres percherones, para poder mantener tanto caballo tendría que irme a vivir al pueblo, con las cincuenta fincas que me dejaron en herencia mis padres, podría mantener al menos una docena y de esta forma repartirlos a lo largo del camino para cambiarlos sin necesidad de esperar a que descansen, igual que lo hacían los arrieros antaño.

Estoy tan ilusionado con la idea, que cada noche le cuento las nuevas ideas a mi almohada, son tantas que algunos días cuando acabo ya está amaneciendo.

Ahora espero que los que estáis con estos dilemas me deis consejos para ayudarme a escoger.

Sin otro particular recibid un cordial saludo.